La navaja de Ockham es
un principio denominado también de economía o parsimonia por el que en
igualdad de condiciones y cuando varias teorías tienen las mismas
consecuencias, la más simple tiene mayor probabilidad de ser correcta
que la más compleja.
Se le atribuye a Guillermo de Ockham
(1280-1349): «pluralitas non est ponenda sine necessitate», las cosas
esenciales no se deben multiplicar sin necesidad.