Plaza de Mayo - 24 de marzo de 2016
A 40 años del golpe cívico militar clerical
No tienen paz.
No tienen nada que celebrar, nada que aplaudir, nada que defender.
No tienen argumentos. No tienen ideas. No tienen memoria, ni sueños que compartir....
No tienen enemigos, porque no tienen a favor de qué luchar.
No tienen compañeros, a lo sumo cómplices o socios de ocasión. No tienen desconocidos que los abracen. No tienen plazas ni banderas. No tienen una historia común.
No tienen las contradicciones de la pasión, la emoción del continuo reencuentro, el orgullo en la derrota, la alegría en la resistencia, el simple amor de la solidaridad, la conciencia de que uno no se salva solo.
No tienen proyectos, construcción, enunciados positivos.
No tienen canciones que los representen ni poetas que los nombren. No tienen una cultura propia.
Les dieron un globo.
Y no tienen paz.
No tienen nada que celebrar, nada que aplaudir, nada que defender.
No tienen argumentos. No tienen ideas. No tienen memoria, ni sueños que compartir....
No tienen enemigos, porque no tienen a favor de qué luchar.
No tienen compañeros, a lo sumo cómplices o socios de ocasión. No tienen desconocidos que los abracen. No tienen plazas ni banderas. No tienen una historia común.
No tienen las contradicciones de la pasión, la emoción del continuo reencuentro, el orgullo en la derrota, la alegría en la resistencia, el simple amor de la solidaridad, la conciencia de que uno no se salva solo.
No tienen proyectos, construcción, enunciados positivos.
No tienen canciones que los representen ni poetas que los nombren. No tienen una cultura propia.
Les dieron un globo.
Y no tienen paz.
Sergio Coscia
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